Urbanismo de La Laguna modifica el PGO para promover espacios de uso público en Valle de Guerra

Urbanismo licita la modificación del PGO para contar con un espacio libre público en el centro de Valle de Guerra

El valor estimado del contrato para la redacción del documento asciende a 313.260 euros y el plazo de ejecución es de 30 meses

La Gerencia de Urbanismo de La Laguna ha sacado a licitación una modificación sustancial del Plan General de Ordenación (PGO), y su evaluación ambiental, para la mejora de los espacios libres públicos de Valle Guerra, con la implantación de un espacio libre público en el centro del núcleo urbano. El valor estimado del contrato para la redacción del documento asciende a 313.260 euros y el plazo de ejecución es de 30 meses. Las ofertas pueden presentarse hasta el próximo 5 de junio.

Según explica el consejero director de la Gerencia de Urbanismo, Santiago Pérez, esta medida viene motivada porque Valle de Guerra cuanta con grandes extensiones de suelo vacante, sin urbanizar, que han quedado aisladas debido a que la ocupación tradicional se ha realizado con viviendas situadas al borde de viarios interiores. Estos recintos de suelo vacío no poseen conexión con el viario público, resultando imposible conformar una mínima trama urbana que resuelva los problemas de insuficiencia de las infraestructuras soporte y que permitan a la vez su desarrollo.

El objeto del contrato consiste en dar una solución urbanística a las carencias legales de espacios libres urbanos en el núcleo de Valle de Guerra. Para ello se estudiará la mejor ubicación de un nuevo espacio libre para que ocupe una posición de centralidad y sirva de elemento conector de las infraestructuras públicas ya existentes como son el colegio público Ayatimas y el IES de Valle de Guerra, y la Tenencia de Alcaldía, la plaza de la Iglesia de Nuestra Señora del Rosario y el pabellón de Valle de Guerra.

Además, se estudiarán cuáles son los mejores mecanismos desde el punto de vista urbanístico y medioambiental y los más viables económica y técnicamente para la obtención y ejecución de este espacio libre, pudiendo ir desde la expropiación hasta la delimitación de algún pequeño desarrollo urbanístico, pero que en ningún caso hipoteque el modelo futuro ni del núcleo ni del municipio.

Santiago Pérez recuerda que durante el procedimiento de adaptación del PGO en Valle de Guerra tuvo especial relevancia la participación de las plataformas ciudadanas que se crearon como consecuencia de la creciente preocupación de la ciudadanía por la sostenibilidad de sus núcleos y el interés de participar activamente en la decisión del modelo de los mismos, teniendo sus propuestas e ideas el plus del conocimiento in situ de la realidad de cada uno de esos núcleos.

Santiago Pérez asegura que “estas iniciativas del Gobierno municipal no son el fruto de una improvisación sino de un largo trabajo que ha requerido dirección política, con el establecimiento de las prioridades, y un gran rendimiento por parte de los diferentes servicios de la Gerencia de Urbanismo”.

“Hemos trabajado proyectos y propuestas alrededor de los cuales existe una gran necesidad y un gran consenso social en sus respectivos ámbitos territoriales”, asegura el también concejal de Ordenación del Territorio, quien pone el ejemplo de la recuperación del litoral de Punta del Hidalgo, “abandonado durante décadas. También hay necesidad y un acuerdo mayoritario para para cerrar el capítulo de la operación especulativa que CC quiso perpetrar al calor de la tramitación del PGO, con el bulevar de Valle de Guerra, que urbanizaba y rompía la imagen y configuración de este pueblo, ocupando para siempre unos espacios que hoy son agrícolas, y que deben tener otra finalidad, como la de ejecutar un gran parque urbano, de tal manera que Valle de Guerra gane en conexión y un gran aporte de calidad urbana y ambiental”, señala Santiago Pérez.

Tanto la modificación sustancial del PGO como su evaluación ambiental deberán fomentar la cohesión social y salud, mediante la correcta planificación y el uso racional y sostenible de los espacios urbanos para mejorar las condiciones de vida; combinar los usos de manera funcional y crear entornos seguros, energéticamente eficientes y accesibles; mejorar las condiciones de vida; fomentar espacios verdes de cercanía e infraestructuras verdes; y teniendo en cuenta los objetivos de desarrollo sostenible.